La realidad de una lagrima en silencio...

Esta entrada, sera simple, sencilla, directa, sincera, dolorosa y algo pesimista...

Que duro es fingir que eres otra persona, pero aun mas duro es convencerte a ti mismo, que la persona que la gente ve, es la que en realidad es.

Aun asi, supongo que algo contradictorio, creo que lo mas duro, es que los que rodean a esa persona, no se den cuentan de lo que siente, no quieran darse cuenta o peor aun, se esten esforzando por encajar en un mundo que no les gusta, en el que entra por devocion a otra persona y son incapaces de ver lo que se estan perdiendo a su alrededor...

Que duro es este caparazon, que duro es ser incapaz de verbalizar... 

Que dura es esta vida de apariencias...

Ni de Marte, ni de Venus...

Estaba leyendo el blog de www.cafedesvelado.com, una vez más, y de repente, al terminar la entrada de “ni nosotros lo sabemos”, me ha saltado una idea a la cabeza: no es que seamos tan diferentes, es que somos muy parecidos.

http://cafedesvelado.com/2014/03/20/ni-nosotros-lo-sabemos/

Las mujeres nos hartamos de decir “¿porque ha dejado de escribirme?”, y nunca se nos ocurre que quizás él esté esperando que nosotras también nos dignemos a hacerle saber que nos gusta. Pero claro, “somos tan diferentes” que ni nos fijamos en esos pequeños detalles.

A las mujeres, por regla general, no nos preocupa que os vayáis de cervezas con vuestros colegas o que le miréis el culete a otra chica, lo que nos preocupa es que prefiráis vuestra cerveza a una tarde de risas con nosotras o que dejéis de mirarnos a nosotras el culete…

Somos simples, ¡básicas! No queremos un superman, queremos un tío que sepa cuándo necesitamos un abrazo, que nos haga reír, que nos mire ¡y adiós al resto del universo! Vamos, lo mismo que buscáis vosotros.

Claro que sabemos lo que queremos, todos lo sabemos, sólo que la mayoría de las veces, necesitamos verlo para saberlo… Lo dificil, es conseguir verlo.